Un breve amor, más fuerte que la música.
Te escribo un poema porque mi vida es poesía gracias a ti.
¿Cuántas milésimas de segundo crees que hay entre estar dormida y estar enamorada?
Son efímeros los momentos de conciencia en los que mi corazón no estalla y mi cabeza hace rato perdió la batalla.
Me siento tentada todo el tiempo de llamarte y sentirte.
Te escribo un haiku porque estoy asombrada al contemplar la belleza de tu naturaleza.
¿Por qué no duermes?
El frío nos sonríe.
Cierra los ojos.
Te escribo una canción, porque ahora mi vida es pura armonía.
No sé nada de composición, pero sé que quiero regalarte todos mis tiempos.
Y es que tu nombre merece ser cantado.
Tu voz, tus audios, son perfectas melodías.
Amo tu ritmo y tus silencios.
Te escribo algo porque hiciste lo mismo.
Y te pido perdón porque hace mil años que no escribo.
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