Y sí, tengo ganas de escribir aunque no tengan tanto valor mis palabras. Hoy vine caminando a la oficina porque anoche dejé el auto aquí: tenía pico y placa y no tenía ganas de quedarme hasta las 19h30, lo siento con ustedes. No estoy acostumbrada a caminar y no calculé bien los tiempos, por consiguiente llegué un poco pronto y bueno, hice mucho: no había ruido y me concentré más de lo normal; para las 9 de la mañana ya había terminado muchas cosas y mi día ha sido básicamente lo que surge y nada acumulado. ¡Wow! ¡No tengo nada acumulado! (Sé que esto es mentira, siempre es mentira. De ley tengo algo acumulado y no lo sé. Es más, me acabo de acordar de algo que no he hecho, por ejemplo, hace como un mes. Ahí seguirá supongo, pues nisiquiera está en tráfico). Son las 12h33 y ya tengo hambre (bueno, he tenido hambre toda la mañana de hecho). Pronto me dirigiré al centro a una reunión/almuerzo con mi padre, ojalá no comamos muy tarde. Este preciso momento estoy escuchando el disco de "The Black Keys - Brothers" y aunque es la décima vez que lo oigo con atención no logro quererlo mucho. ¿Será que se demora? Milenko me dijo que a la primera vez que lo escuchó ya se dio cuenta de que era un buen disco (y todas las páginas a las que me refiero diariamente piensan lo mismo). Igual ya estoy acostumbrada y las canciones me son muy familiares, pero de verdad, no es para mí.
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